La música, interpretada por sus discipulos, en el adiós al maestro José Maria Arrabal

La parroquia de la Purificación de Almendralejo se llenó de fieles para despedir los restos mortales del maestro José María Arrabal, un músico extremeño, nacido en esta ciudad, que ejerció su labor en muchos lugares de Extremadura. Entre otras cosas fue director de la Banda de Música y Coral de Los Santos, de la Banda del Colegio San José de Villafranca y de bandas y corales en otros lugares.

Sus familiares recibieron la solidaridad de mucha gente del mundo de la música que se hicieron presentes, llegadas de distintos puntos de la zona. Entre ellos miembros de la Coral y de la banda de Los Santos y el concejal de Cultura Antonio Marín.

Marcha fúnebre

El féretro entró en el templo mientras un grupo de componentes de la llamada 'banda del maestro Arrabal', entonaba una marcha procesional fúnebre: Mater Mea de Ricardo Dorado. Era casi imposible simular la emoción y las lágrimas rebosaban por las mejillas de muchos de los amigos y seres más queridos. Durante la ceremonia la música volvió a sonar, a piano y voz ,con una bellísima interpretación del Ave María de Caccini.

Pasodoble

Y mientras los asistentes al acto daban el pésame a su familia- viuda, sus tres hijos y resto de familiares- sonó un pasodoble, el que el maestro José María Arrabal compuso a Miguel Ángel Perera y que fuera estrenado por la Banda de Música de Los Santos en Puebla del Prior. Un pasodoble que ha sonado en numerosas plazas de toros, mientras el torero extremeño hacia faena, y que ahora ha servido como homenaje póstumo a quien lo compuso.

Un componente de la Coral Santeña que además es poeta, Juan Cano, subió al altar y leyó los versos que dedicó a su maestro en esta triste despedida.

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