Luminoso Domingo de Ramos con la 'Burrita' desfilando por las calles de Los Santos en una solemne procesión

El pueblo de Los Santos se echó a la calle en un luminoso Domingo de Ramos. La Procesión de Jesús triunfante en Jerusalén - la Burrita- salió de la ermita de San Lorenzo tres cuartos de hora después del horario previsto debido a un mal entendido de la Banda de la Agrupación Musical La Merced de Alméndralo que acompañó a la procesión.

Cortaleros con arte

Palmas, ramos de olivos, niños vestidos de hebreo, muchos fervor costalero, una cuadrilla increíble a las órdenes del capataz Javim quienes hicieron las delicias de quienes siguieron la procesión – chicotás adecuadas, paso con mucho arte- con la campanita de la ermita de San Lorenzo, y las de la torre de la Iglesia, tocando para tan solemne procesión presidida por el cura párroco, Leonardo Terraza, a quien acompañaban los hermanos mayores de las cofradías y las primeras autoridades locales.

Gente en la calle

Rojo en las vestimentas y en la calle del Pozo adornos de ramos de olivos para recordar la entrada de Jesús en Jerusalén. Algunas colgaduras en los balcones de otras calles y mucha bulla en la puerta de la tienda de golosinas y de pasteles de Maribel, bares llenos en el centro, mesas reservadas para una comida que se supone larga. Paseo de las Barnadas lleno a la hora de la entrada del paso de la Burrita. Buen ambiente costalero.

Coro Sagrado Corazón

Tras la entrada del paso en la Parroquia- que discurrió por las calles Ramón y Cajal, Pozo, La Estrella, Fernández Santana, San Miguel y Plaza de España, se inició, a la una de la tarde, la homilía oficial de este domingo de Ramos, preparada por la Hermandad de la Burrita y en la que cantó el coro Sagrado Corazón. Cada día avanza más en calidad este coro que ha unido instrumentación como un saxo, acordeón y percusión. Magnificas voces, gusto y conjunción bajo la batuta de Reme Cuellar.

Presidió la Eucaristía, revestido del correspondiente color rojo el día, el párroco. Leonardo Terrazas, quien animó a vivir desde la fe, los próximos días de la Semana Santa.