Ha muerto el pintor José Luis Gancedo, un mago de la luz y el paisaje

Ha muerto el gran pintor de la luz y el paisaje. José Luis Gancedo. En su casa de la familia Gancedo Gordillo, en la calle Dr. Fernández Santana de Los Santos, huele siempre a pintura de paleta de artista y allí se está rodeado de obras de arte por todos lados. Las del maestro José Luis Gancedo y las del tío Luis Gordillo.

Gancedo ha sido un pintor de cuidada sensibilidad creadora y de despierta inspiración que llevaba al lienzo los profundos paisajes, las transparencias de un racimo de uvas en la viña, la fruta fresca del verano en los bodegones, flores, retratos y autorretratos.

Alumno de su tio

Aprendió viendo pintar a Luis Gordillo, tío de su mujer Carmen con la que ha vivido en Los Santos desde los años ochenta en que se trasladó desde Madrid. Se vino buscando el encanto de los pueblos y vaya si lo he encontró….con los paisajes únicos, las luces, las persona… porque Gancedo pintaba todo aquello que le rodeaba y, entre todo ello y más importante, al ser humano; por eso tiene en su obra tantos retratos repartidos por todo el mundo; un estilo sumamente difícil para un pintor.

Solo en un par de exposiciones, una de ellas casi antológica del pintor, hemos podido ver en los santos la obra de Gancedo. La última en 2014.

La última vez que vi a Pepe pintando lo encontré ágil y con él subí la empinada escalera hasta su estudio en la parte alta de la casa, el mismo que utilizara el tío Luis, pero con mejor luz. Allí Gancedo se hacía grande como artista, pleno de inspiración.

Dijo de él el abogado, pintor y escritor Fernández Fuster que «cuando al pincel de Gancedo le ayuda la inspiración, lograba esa atmósfera donde sentir la emoción, para gozar ante la pintura de creación». Pues así fue Pepe Gancedo. La excelencia en la pintura.

De la cuna de artistas

Gancedo, ha sido uno de los grandes de la nómina de pintores de Los Santos 'cuna de artistas' que tan bien ha sabido captar los paisajes, las miradas de las gentes, la luz de sus impecables bodegones, las transparencias, los jarrones con flores que tanto le apasionaba.

Ha fallecido Gancedo y deja a su pueblo de adopción huérfano de sus colores, de su magia. Quien ha muerto en la víspera de los Reyes Magos, era de por sí un mago de los pinceles. Tenía 89 años.

Los padres de Gancedo quisieron que fuera abogado y estaba convencido hubiera sido un desastre: «abogado yo…cuando lo que me apasiona es esto, pintar»….nos decía siempre el maestro.

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