Ha muerto Manolo Hernández 'Grillito', un maestro de la bandeja y de la auténtica amistad

Ha muerto, con 84 años, Manuel Hernández Moreno, popularmente conocido como 'el Grillito' por herencia familiar. Un hombre amable por naturaleza, agradable, pulcro, que vivió intensamente la profesión de camarero, no solo en Los Santos sino allí donde- especialmente en las ferias- era contratado. En 2019 el ayuntamiento de Los Santos lo distinguió con el premio 'Los Santos Excelente' por toda una trayectoria profesional.

No hay mejor palabra que defina a Manolo el Grillito como la de 'excelente'. Lo fue con su familia, siempre desviviéndose por ella. Con sus amigos, demostrando una entrega sincera; fue excelente con el pueblo que lo vio nacer, Los Santos de Maimona, 'su pueblo' por el que, hasta hace pocos dáis, lo veíamos pasear, últimamente de la mano de una cuidadora. 'El grillito' fue excelente en todo aquello que se propuso en la vida

«Aprendí las primeras reglas en la escuela de Don Daniel y a los 10 años – 1.950- me sacaron de la escuela para comenzar a trabajar de botones en Labradores que entonces tenía su sede en la Plaza, pero en la casa de los Murillo», decía en una entrevista para este periódico en 2019.

El pueblo llora su perdida, la hostelería está de luto. Dejaremos de escuchar su voz potente, hablando siempre, escuchándo siempre; memoria descriptiva, un libro abierto. Recordaremos su forma de toser en las misas de los difuntos, a las que acudía con suma frecuencia, y su generosidad a la hora de invitar en una barra de un bar. Conocía a todo el pueblo, y nos apreciaba, pero de verdad y con toda su cariñosa manera de ser.

Una familia hoy, estará muy apenada. La familia de Casi Gordillo.

«Casi y yo nos hemos tratado tanto que yo lo considero mi hermano y a sus hijos mis sobrino…es una familia maravillosa. Dicen que el roce lo hace el cariño y para mí su familia es mi autentica familia. Me he alegrado con ellos y he llorado sus pérdidas con ellos», decía el Grillito en aquella entrevista.

Bandeja de oro

Manolo entendió que un camarero tiene que ser «pulcro y aseado, vestir su uniforme, ser atento con el público, atenderlo como Dios manda y honesto con quien lo contrata», nada más y nada menos. Ha muerto un maestro de la bandeja y de la amistad. Una autentica bandeja de oro. Junto a su hermano José, la pareja de 'grillitos' enseñó el nobre oficio de camarero a muchos jovenes. José Santiago Lavado y Ántonio´el de Labradores pueden dar fe de ello.

Trabajó en la Cafetería Marín sirviendo muchas bodas: «Yo empecé con él sirviendo bodas y cuando se cerró en su segunda etapa di con él su ultimo banquete».

También estuvo de camarero en el bar del Parque que se inauguró en el año 1979, hasta el año 83 con el Chovo. Y últimamente trabajó con Marcelo, y Resti y en el Pub de Paco… también en el Casino lo hemos visto trabajar…..en el Rocío y en fiestas particulares.

Desde que dejó la bandeja fue amante de la cultura y con frecuencia se le veía en los eventos que se organizan en el pueblo: teatros, exposiciones, conciertos.

Vivía solo en su casa de la calle san Bartolomé últimamente atendido especialmente por su familia y una cuidadora. No le importó nunca que le llamasen por el apodo «Grillito»

«Viene desde el abuelo de mi padre, que dicen cantaba bien y empezaron a decirle el grillito por su afinada voz…desde ahí ha ido pasando de unos a otros ese 'grilleo' en la familia», explicaba divertido

El sepelio de manolo Hernández, tendrá lugar este sábado 16 de septiembre a las cinco de la tarde en la parroquia de Los Santos de Maimona. En sus tiempos mozos, en estas fechas el Grillito estaria en las fiestas del Cristo en algún pueblo.

Se ha ido un gran camarero y mejor persona. Ejemplo de tantos como hoy empiezan a llevar una bandeja en las manos: maestro de ese arte de servir bien, sabiendo estar siempre a la altura de lo que debe ser un buen servicio de mesa en un bar o restaurante. Sin servilismo, con paciencia de maestro de la bandeja. Escuela viva del saber comportarse.

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