Gema Tinoco, una enamorada de crear espacios cómodos y bonitos

La interiorista Gema Tinoco ha sido la artífice del radical cambio de aspecto del interior de la Asociación de Agricultores (Labradores), una reforma que ha sido muy bien acogida y valorada tanto por parte de los socios como por el público en general.

«Me encontré con un lugar lúgubre, muy dejado y oscuro, con espacios mal repartidos. Lo primero que quise fue darle luz, quitar esa oscuridad, los muebles viejos y hacer de la sociedad un lugar amplio, limpio y luminoso», explica.

Su trabajo en este lugar, con los primeros planos, comenzó en septiembre de 2019, y concluyó el 12 de junio, cuando Labradores abrió de nuevo sus puertas.

Se han eliminado los tabiques y se ha instalado uno móvil que separa la zona de cafetería de la reservada a los socios. También se ha instalado un zócalo decorativo que sirve para que las paredes respiren, de hecho, uno de los principales problemas que se encontraron en esta reforma fue el que había originado la humedad.

Ahora las paredes lucen con pintura clara, se ha puesto una nueva iluminación, el mobiliario nuevo y se ha cambiado el suelo de la trasbarra. La barra ha sido diseñada a medida y es una de las zonas donde más se ha notado el cambio.

«Ahora es un lugar moderno, acogedor, confortable y adaptado a los nuevos tiempos, pero que a la vez mantiene el espíritu de una sociedad centenaria. Creo que se ha conseguido», dice Gema, quien además pone en valor todos los oficios de quienes han participado en esta obra, «la ejecución ha sido perfecta».

Labor del interiorista

Aprovechando esta reforma, le hemos preguntado a Gema Tinoco por cómo es la profesión de interiorista, a veces desconocida, pero que puede ayudar mucho a la hora de tomar decisiones, quitar complicaciones y dar alivio a las personas que vayan a comenzar una reforma.

«Mi trabajo consiste básicamente en hacer lugares cómodos, bonitos, habitables y aprovechar todos los espacios», dice Gema, que como interiorista se encarga, entre otras cuestiones, de realizar desde una reforma limpia en aquellos casos en los que el cliente quiere dar un nuevo aspecto a su casa o local sin obra, hasta el asesoramiento en decoración, compras, intermediación entre los distintos oficios que intervienen en la reforma o asesorar en cómo sacar el mayor partido posible a una casa antigua que creemos que puede que no tenga posibilidades.

Para ello lo primero que hace es tener una entrevista con sus clientes para conocer el espacio, los gustos y el presupuesto. «Hay quien piensa que el trabajo de interiorista es caro, y a veces no está pagado, por lo menos en mi caso. Animo a todos a que antes de realizar una reforma me consulten sin ningún compromiso», dice Gema, una apasionada de su trabajo y de crear espacios bonitos.