Antonia Corbacho:«la misa diaria me pone las pilas, es mi sustento más importante»
Antonia Corbacho es madre y abuela y ejerce su voluntariado más ejemplar con 71 años ·
«Lo que más me llena es el grupo de visitadores de enfermos, porque es el colectivo con lo que más me identifico ya que vuelvo a ver, en sus casas o en la Residencia, a mis antiguas clientas de la peluquería en el hogar de mayores.
Jueves, 1 de junio 2023, 19:54
Antonia Corbacho:«la misa diaria me pone las pilas, es mi sustento más importante»
Antonia Corbacho tiene 71 años, pero una actividad inusitada. Madre de 5 hijos- todos ellos casados y abuela de 6 nietos- su actividad es, seguramente, muy parecida a la de otras abuelas, atendiendo a sus hijos y especialmente a sus nietos.
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«Mis nietos que van al instituto comen en casa todos los días y los otros se reparten en días alterno. Eso hace que me sienta muy activa en la cocina y, a veces, tenga que dejar la comida hecha la noche anterior porque no me da tiempo».
Antonia, seimpre dispuesta
Lucio Poves
Y es que Antonia Corbacho ejerce de una manera ejemplar en la Parroquia Ntra. Sra. de los Ángeles en grupos muy diferentes: pertenece a las Franciscanas de Los Santos, es miembro de la pastoral de visitadores de enfermos, componente de la directiva de la Archicofradía Sacramental, pertenece al grupo de liturgia y ayuda en todo lo que sea necesario. No es la primera vez que se le ve obsequiando al párroco Don Leonardo con algunas de sus especialidades culinarias que son muchas y muy ricas.
Visitadora de enfermos
«Lo que más me llena es el grupo de visitadores de enfermos, porque es el colectivo con lo que más me identifico ya que vuelvo a ver, en sus casas o en la Residencia, a mis antiguas clientas de la peluquería en el hogar de mayores. Durante 25 años yo fui quien las peinó y tenía una relación magnifica con todas ellas».
Antonia Corbacho es de Santa Marta pero, por cuestiones de trabajo de su marido, Antonio Alburquerque, en la Díter aterrizó en Los Santos.
Antonia es voluntaria en la parroquia
Lucio Poves
«Estábamos en Illescas, en Toledo, y la fábrica donde trabajaba mi marido en Cubas de la Sagra. Llevábamos siete años allí, pero hubo cambios en la Diter y trasladaron a mi marido a Zafra, en el año 1984. Pero mi cuñado nos dejó un chalet de los de Asland y ese fue el motivo por el que nos quedáramos a vivir en Los Santos y no en Zafra. Además aquí en Los Santos enseguida nos acogieron de una manera extraordinaria y siempre me he sentido muy feliz». Dice Antonia a la que lo único que le pesan son sus rodillas. En el coche que conduce con prudencia y soltura, va de un sitio para otro siempre activa, siempre con la voluntad a flor de piel.
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Familia numerosa
A Los Santos, Antonia Corbacho llegó con tres hijos y aquí nacieron los dos más pequeños.
«Me dedique a criar a mis hijos, que ya era bastante, y en el 92 la carga económica era pesada y solicité una plaza libre de peluquera en el Hogar de Mayores y allí estuve atendiendo a las socias del hogar hasta que me jubilé con 66 años. Una etapa muy recordada para mí, porque fue muy enriquecedores y fui muy querida por todos. Se puede decir que mi vida más plena se desarrolló en el hogar».
Con la familia en una comunión
Lucio Poves
De esta manera Antonia alternaba las cosas de ama de casa, con la peluquería. Pero a Antonia siempre le tiraron las actividades de la Iglesia
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«En Illescas ya fui madre catequista y ya en Los Santos, el desaparecido párroco Don Ángel Muñoz me requería para algún voluntariado y yo siempre estaba dispuesta»
Y así Anotia perteneció al grupo Sinodal, a la pastoral para preparar las misas- el antecedente al grupo de liturgia- fue miembro del Consejo de la Parroquia y estuvo metida en las Ampas de los colegios o el instituto donde estudiaban sus hijos.
«No me dejé nada para atrás- dice orgullosa- porque necesitaba llenar mi vida y porque me gustaba. Muchas veces Diego Duran, que fue conserje en el Hogar de Mayores, me decía…Antonia vamos a ver si llegamos a tiempo a la misa de la tarde…»
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Café con amor
Ahora también está metida en lo que llaman 'café con amor'. Una iniciativa de la Parroquia para abrirse a los emigrantes que viven en Los Santos.
«Son reuniones con quienes tuvieron que dejar sus países y sus costumbres; tomamos con ellos un café, hablamos de sus problemas, les orientamos y, sobre todo, les acompañamos. El otro día les llevé a una de estas familias un bizcocho que hice en casa y fue muy enriquecedor».
Y Antonia Corbacho nos confiesa que «la misa diaria me pone las pilas; es mi sustento más importante para poder llevar toda la carga» .
A Antonia la vemos en el Centro Parroquial haciendo su guardia como conserje voluntaria cuando le toca, ha hecho los cursos de Formación Básica y de agente pastoral, es asidua a las procesiones llevando la cinta del paso de alguna imagen de Virgen. Una mujer valiente, madre de familia numerosas, bien formada religiosamente y que se deja querer por su voluntad para hacer todo aquello que se le pide.
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