Y quince años después lo volvió a hacer

El Ortiz más luchador de los últimos años y el más reivindicativo se subía a las tablas de una nueva edición mundial de culturismo representando una vez más los colores de la bandera de España. En las últimas fechas con sus triunfos en las manos como Subcampeón de Europa y cuádruple Campeón de España reclamaba más ayudas a su deporte y a él como deportista. Desde luego motivos tiene para que sea reconocido su esfuerzo.

La noticia saltaba a media tarde del viernes de forma viral, un video escuchando el himno de España muy emocionado se encargaba de dar la primicia que no era otra que nuestro paisano volvía a ser Campeón del Mundo, ahí es nada.

Conociéndole el premio de participar en este tipo de eventos mundiales supone un caramelo para él, que no se saborea igual sin trofeo «Supongo que como en todos los demás deportes, un mundial representa el colofón a tus objetivos deportivos, al menos en mi caso representar a España en este escaparate único y ante un gran número de países es una satisfacción enorme, máximo cuando escuchas el himno nacional con motivo de tu victoria. Hasta las lágrimas se me saltaron en ese momento. Estamos hablando que han participado atletas de 5 continentes, unos 50 países representados en el evento. Es muy emocionante cuando te preguntan de dónde eres y tienes que explicar que eres de Los Santos de Maimona, un pueblo de Badajoz, Extremadura, España».

Las últimas semanas han sido muy bonitas para el culturista santeño ha disputado y disfrutado a partes iguales en los campeonatos en los que había participado, ocupando siempre las partes altas de las clasificaciones, incluso peleando con los seniors y el premio tenía que llegar más pronto que tarde «Pues he llegado bien al campeonato con mucho ánimo, como ya he dicho otras veces, este deporte es mi pasión y aunque a veces pesa un poco la dieta, eso pasa en pocas ocasiones. Me gusta la disciplina en mis horarios y en mi día a día, los que practicamos este deporte elegimos un modo de vida que conlleva una «forma de vivir», no se puede ser culturista 1 hora, se es culturista 24 horas al día, porque la alimentación es fundamental para llegar con una buena puesta a punto y por eso se necesita un apoyo total de todo el entorno y de tu pareja sobretodo, sino sería imposible».

El fin de semana en la localidad barcelonesa de Santa Susana se daban cita los mejores culturistas del mundo, en un año muy complicado. Jose Luis Ortiz ha participado en dos de las categorías puestas a concurso por un lado Master Bodybuilding de 45 a 49 años y 90 kilos donde se colgaría el oro en la sesión del viernes, por delante de la representación de Polonia y la República Checa y en Senior Bodybuilding 90 kilos que tras un ajustado final se quedó a las puertas del pódium.

Cada competición la vivió de una manera diferentes lógicamente y así nos lo contaba «Ya no sólo tras el oro, sino en ese momento oír tu himno, por un logro que tú has conseguido, no tiene descripción y lógicamente lloré, me emocioné con lo que estaba consiguiendo. La sensación con el cuarto puesto es muy diferentes ya que tener podios a unos puntos me dio rabia y ganas de seguir adelante trabajando y poner medidas para mejor ese puesto».

El campeón santeño valora muy positivamente a la organización del campeonato, por como se ha desarrollado todo dentro un escenario único e inmejorable, tanto desde el punto de vista del atleta como en el ciudadano de a pie, por todas las medidas de seguridad COVID que han rodeado el evento.

Sin duda alguna no es fácil mantenerse en los puestos tops tantos años y al ser recordado su primer mundial hace ya 15 años una sonrisa recorre su sufrida y trabajada cara «A parte de la edad que es 15 años mayor y del peso que he ganado también 15 kilos de 75 a 90, lo demás sigue intacto a pesar de todo el trabajo y esfuerzo que hay detrás con una mujer que me apoya incondicionalmente. Sigo aportando pasión, ilusión a raudales y además la veteranía me hace disfrutarlo de un modo diferente, ya que me da más tranquilidad, más confianza y eso se nota a las hora del estar delante de un jurado y un público».

No está satisfecho, por el contrario, con todo lo que rodea a su deporte y más tras haber visto como funciona este deporte a otros niveles y en otros países «No ha cambiado nada por qué nadie desde las instituciones se han dignado a cambiarlo, un mínimo de reconocimiento, no a mi persona, sino a un deporte muy profesional y valorado en otra comunidades y otros países participantes en este mundial, cosa que en Extremadura y en Los Santos de Maimona no pasa».

Como siempre estos éxitos son compartidos especialmente con su esposa, Mari Carmen, que le acompaña fielmente en sus triunfos pero especialmente en los momentos más duros que tiene este difícil deporte, donde el santeño ya ha demostrado de más y de sobra la figura que es «No me canso de repetir y recalcar todo el agradecimiento a mi mujer Mari Carmen Matos, porque ella es mi avanzadilla en todo los pormenores que surgen en una preparación para competir y en el día a día, ella es la que hace de filtro en todos los momentos difíciles que hay en este proceso. Además os agradezco mucho a todos los que de un modo u otro estáis ahí apoyándome día a día a través de cualquier modo, muchas gracias».