Los Zanders se llevan la primera edición de la liga de verano de baloncesto

Las semis

La primera de ellas, disputada entre los TIMBERGUOLS y los GUORRIORS, partido marcado por la igualdad, donde el equipo de los Guorriors llegó al final con una pequeña ventaja que un inspirado Jony, se encargó de dilapidar para dar a su equipo, los Timberguols, el pase a la gran final.

En la otra semifinal, entre los ZANDER y los LEIKERS, volvió a reinar la igualdad, hasta llegar a un final de infarto. A falta de 8 segundos, los Zanders disponían de dos tiros libres con dos abajo si bien desperdiciaron los tiros desde la línea de personal, cogieron el rebote ofensivo para decidir el partido con un triple de David Sánchez a falta de dos segundos, que les daba plaza para la gran final.

Final

Tras varios cambios de horarios para facilitar la máxima participación, la gran final se disputó en el pabellón del Instituto el primer día de septiembre. La liga contaba con la colaboración de la Cofradía Virgen de la Estrella y la final del torneo era una de las actividades deportivas incluidas dentro del programa de eventos de las fiestas patronales.

ZANDERS Y TIMBERGUOLS se dieron un atracón de intensidad para decidir el que sería el ganador de la I SUMMER LEAGUE santeña, aunque si lo llevamos al castellano todavía se recuerdan con añoranza por muchos de los participantes las ligas de verano organizadas por el querido Don Antonio Martínez en el patio del Juan Blanco, y que son, sin duda, el germen de ésta y otras competiciones de baloncesto en la localidad.

La final resultó ser menos emocionante de lo esperado por el gran acierto en el tiro de larga distancia del equipo de los ZANDERS, que vieron aro con facilidad desde el primer minuto, llegando a tener ventajas de 20 puntos. Finalmente el marcador reflejó una merecida victoria de los ZANDERS por 87-76. 11 puntos de diferencia entre ambos equipos.

Durante el descanso de la final se disputó un torneo de triples que tuvo como ganador al joven Manuel López, imponiéndose en la final a Marco Merchán y Luis Javier Morato. La deportiva entrega de trofeos final terminó con fotos de los equipos y un deseo común: el año que viene hay que repetir