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En 2.004 Tinoco y Murillo asisten como miembros del Consejo de Alcaldes con las medallas recibidas el año anterior.
Las razones de los ex-alcaldes Zapata y Santiago Lavado para renunciar a la 'medalla de la villa'
EN SENDAS CARTA SE LO HICIERON SABER AL ALCALDE ACTUAL

Las razones de los ex-alcaldes Zapata y Santiago Lavado para renunciar a la 'medalla de la villa'

El anuncio hecho en el discursoinstitucional del día de Extremadura del actual alcalde sobre la renuncia de los ex alcalde Antonio Zapata y José Santiago Lavado a recibir la medalla de oro de la Villa han suscitado no pocas preguntas. Ambos presentaron escritos de renuncia por diversos motivos y antes se lo hicieron saber en una reunión mantenida con el alcalde. De hecho solo se instruyó el expediente de la medalla a Tinoco pero se aludió en el pleno a la renuncia de Lavado y Zapata. Aquí están sus razones

Lucio Poves

Sábado, 9 de septiembre 2017, 09:30

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Durante el discurso Institucional del día de Extremadura, el alcalde de Los Santos Manuel Lavado, aludió a que el ex alcalde Antonio Zapata Llerena y José Santiago Lavado habían declinado el ofrecimiento hecho por el equipo de gobierno para recibir la medalla de oro de la Villa. Lo dijo y lamentó que ello hubiera sido así aunque respeto su decisión. No se explicaron los motivos y desde hoy Los Santos los hemos pedido y se nos han dado respuestas.

Como arranque de todo hay que situarse en el año 2.003 en que, gobernando como alcalde José Santiago Lavado, constituyó un Consejo de alcaldes compuesto por aquellos que le antecedieron en el cargo y que aún estaban vivos: Francisco Murillo de la Calzada, Cipriano Tinoco y Antonio Zapata. A los tres les dio una alta consideración en todos los actos municipales y les impuso el 8 de septiembre de aquel año- según se recogen en las actas plenarias de la época- el escudo de oro de la villa de Los Santos y la medalla de la Corporación Municipal- un documento gráfico recoge en un cuadro ese momento. Unos meses más tarde el día de la Constitución de ese año- distinguió con los mismos atributos al que fuera primer alcalde republicano Antonio José Hernández, siendo sus familiares quienes los recogieran a título póstumo. A todos ellos encargó un cuadro con su retrato que se conserva en los pasillos de la parte noble del Ayuntamiento. Fue el mismo alcalde Santiago Lavado, quien creara en esas fechas las medallas de oro de la Villa que año tras año han ido recibiendo personas o entidades que se hayan distinguido por su trabajo en pro del municipio. En su nómina no han aparecido políticos hasta ahora. Y es la primera vez, desde 2.004 en que han sido rechazadas.

El motivo que alega el ex alcalde Antonio Zapata es que, con ese escudo de oro y la medalla de la Corporación y una residencia que lleva su nombre- está más que honrada su memoria del paso por la alcaldía durante dos legislaturas, entendiendo que concederle ahora la medalla de oro de la Villa es redundar sobre los mismos honores que ya se le concedieron en 2.003. Y se apoya en el hecho de que aquel reconocimiento lo recibí por mis méritos como alcalde y no por otra cosa distinta

José Santiago Lavado que suscribe lo dicho por Zapata- no tiene aquel escudo, ni la medalla de la corporación y ahora ha renunciado a ésta que se le ofrecía por los motivos que alega en la carta enviada al Ayuntamiento y que nos ha remitido y de la que extraemos lo fundamental

expresar mi adhesión al escrito presentado por Antonio Zapata porque, efectivamente, el reconocimiento institucional a los alcaldes que me precedieron ya se efectuó en su día en la forma y manera que él expone y así está acreditado; por lo que volver a reiterarlo supone desde mi punto de vista un intento de minimizar aquel acto que se hizo desde el más absoluto respeto a las personas homenajeadas que formaban parte del Consejo de Alcaldes que de no haber sido suspendido, seguirá vigentey en segundo lugar, no puedo aceptar el reconocimiento que se ofrece en la propuesta del equipo de gobierno seis años después que dejara mi responsabilidad institucional, sin que haya habido absolutamente ninguna relación (con el equipo de gobierno) - más bien todo lo contrario- que permita un cierto atisbo de sinceridad en la propuesta que ahora se hace y que se encuadraría en una medida de carácter político a la que no puedo ni debo prestarme.

Aun así- concluye el escrito de Santiago Lavado- agradezco la propuesta. De situarse en otro entorno institucional que permita equiparar el mismo reconocimiento que se hizo a los alcaldes que me precedieron escudo de oro y medalla de la corporación- no tendría inconveniente en aceptar y siempre que el acto no estuviese rodeado de connotaciones políticas.

Como añadido a la información, hemos de señalar que en un pleno anterior al del día de Extremadura, se decidió no incoar los expedientes de la concesión de la medalla a Zapata y Santiago Lavado, hasta que estos no mostraran su aceptación. Como declinaran el ofrecimiento, es por lo que se tramitó solo el de concesión de la medalla a Cipriano Tinoco a título póstumo. No obstante al incluir el actual alcalde Manuel Lavado en su discurso institucional esas dos negativas es por lo que se ha abierto el gran interrogante del porqué de las renuncias y en este artículo hemos tratado de responder.

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