Lucio Poves
Sábado, 31 de marzo 2018, 11:38
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La lluvia impidió que el paso del Amarrao con la urna del Cristo Yacente procesionara por las calles del pueblo pero, en el interior de la Iglesia Parroquial tuvo lugar una ceremonia llena de ritos y emociones cuando los costaleros avanzaron por la nave central de la Iglesia hasta el bajo coro con el paso y la Banda de Música de Los Santos interpretaba una marcha procesional. La Virgen de las Angustias había sido colocada en un lateral por parte de las costaleras que luego, junto a sus compañeros costaleros del paso del Cristo, hicieron un pasillo por donde fue trasladada la imagen del Cristo Yacente a los sones de una marcha fúnebre. Las Hermandades y Cofradías con sus estandartes, también daban escolta a tan tradicional estampa.
Una vez colocada la imagen en el altar mayor se llevó a cabo el rito del entierro con la firma del sacerdote y autoridades en el libro de actas de la hermandad,.
La iglesia estaba llena de fieles que pasaron para testimoniar su respeto al Cristo muerto y recibieron un clavel y un trozo del galón con el que se envuelve la Imagen como recuerdo de este Viernes Santo
La banda de Música, bajo la dirección de José María Arrabal, ofreció un auténtico concierto de marchas procesionales mientras que las largas filas de fieles se acercaban al altar.
Todo muy emotivo, escrupulosamente organizado y con la elegancia que la Cofradía del Señor Amarrado a la Columna, Ntra. Sra. de las Angustias, Santo Cristo Yacente y Santa Cruz sabe hacer las cosas. El Cristo y la urna quedaron guardados en la capilla de la Virgen de Lourdes donde permanecerán hasta el año próximo.
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