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'Se Vende' fue la chirigota encargada de cerrar el festival
Las murgas brillan con luz propia sobre el escenario del Monumental

Las murgas brillan con luz propia sobre el escenario del Monumental

Sus actuaciones divirtieron y emocionaron por igual a un público que se deshizo en carcajadas y aplausos durante las tres horas del espectáculo

ana magro

Viernes, 5 de febrero 2016, 16:51

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Todos los grupos que participaron en el Festival de Murgas del Carnaval 2016 brillaron con luz propia. Sus actuaciones divirtieron y emocionaron por igual a un público que se deshizo en carcajadas y aplausos durante las tres horas que duró el espectáculo.

Uwe López y Nazaret Hernández Atajarka-, tan espontáneos e ingeniosos como siempre, hicieron gala del humor al que nos tienen acostumbrados nada más abrir el telón encarnando a sus personajes más populares las Chachas, que vuelven un año más al Carnaval, primero como los muñecos de óxido de la plaza de San José y después como animadoras de La Yeyi. En cada una de sus apariciones sacaron punta a los hechos más relevantes del panorama local y nacional, pero también a los más insignificantes que muchos habían olvidado. En todas ellas el estilo de la humorista Lina Morgan estuvo muy presente, ya que este dúo quería rendirle así su particular homenaje. Las Chachas fueron las encargadas de inaugurar el Carnaval y este año, por primera vez, lo hicieron ayudadas por tres personas del público a las que, sorprendidas, subieron al escenario y disfrazaron.

LAS MURGAS

Con mucha energía comenzaron la actuación Las Tontas del Bote, la murga de la Asociación de Mujeres, que, muy bien caracterizadas, también hacen un homenaje a la desaparecida Lina Morgan. Sorprendió su puesta en escena, cuando de repente llenaron el escenario de alegría y bailes durante toda la actuación. Con su ritmo tranquilo fueron muy directas en sus temas, dedicando especialmente uno a las madres con el síndrome del nido lleno -aquellas cuyos hijos no acaban de independizarse- y otro a su propia asociación por su 25 aniversario.

Encantaron también las niñas, en esta edición como La Guardiana. Entraron por detrás del patio de butacas repartiendo serpentina a su paso, muy guapas y seguras, brillantes con sus trajes de fantasía. Sobre el escenario volvieron a impresionar con la fuerza de sus voces, armonía y su profundidad, sobre todo en los pasodobles con los que lograron poner a más de uno el vello de punta.

Que llevan mucho tiempo juntos en esto del Carnaval lo dejaron claro Las Presas Ibéricas, tercer grupo en subirse al escenario. Desenfadados, con música propia, unos temas bien trabajados, buenas voces y perfectamente compenetrados llevaron a escena un grupo de presidiarias, algunas de ellas muy famosas, a quienes, tan rebeldes como siempre, no quedó nada por decir.

Los últimos en actuar fueron los niños con su chirigota Se Vende, unos árbitros muy descarados y fácilmente sobornables que completan su actuación musical con distintas escenas teatrales muy cómicas. Sus letras tampoco dejaron indiferente a nadie, sobre todo el cuplé, con una composición muy original y una divertida puesta en escena.

El buen trabajo y esfuerzo realizado por todas las comparsas sobre las tablas del Monumental está más que justificado con las risas y aplausos de un público entregado de principio a fin. También hay que destacar la buena organización tanto en el escenario, con tiempos muy controlados, como en la entrada y en la salida al festival y detrás del telón, gracias al personal encargado al que hay que felicitar por su trabajo entre bambalinas.

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