La familia Díaz Cumplido se supera con la crisis y unifica sus negocios en 'La Casa Grande'

Es por ello, que a pesar de la negativa de Rosa a hacerlo, con el tiempo la casa se puso en venta y tuvo varios compradores, quienes quisieron hacerse con ella a un precio muy por debajo de su valor aprovechando el mal momento económico. Uno de los compradores recuerda Juan- era asiático, no se la vendí porque pude entrever que me iban a sacar del mercado, algo que pasaría después cuenta Juan Díaz. Yo no quería vender la casa, pero la mi familia me veía agobiada y me convencieron de la necesidad de hacerlo. En esos momentos lo pasamos muy mal porque además se cerró la tienda de Juan y económicamente tiraba yo de todo con la peluquería, añade Rosa.

Finalmente aguantaron con la casa y hace un año y medio volvieron a replantearse su proyecto, cuando su hija Rosa Mª que cuando finalizó sus estudios comenzó a trabajar con su madre en la peluquería ampliando sus servicios con estética- necesitaba darle un cambio a su lugar de trabajo, muy reducido. Fue entonces continúa Rosa- cuando nos pusimos otra vez a moverlo todo, a averiguar, visitamos bancos al final nos dieron financiación y nos pusimos manos a la obra muy ilusionados, aunque los presupuestos se han disparado, no hay tantas ayudas para empresarios y emprendedores como se anuncian y Patrimonio nos ha puesto muchos inconvenientes.

La obra comenzó hace unos 14 meses y ha habido que pararla varias veces. La peluquería ya la teníamos planteada y buscamos a alguien que nos ayudara, Elena Rebollo, que es interiorista, con ella trabajamos conjuntamente para integrar la antigüedad y la esencia de la casa con la modernidad que exigen los nuevos tiempos, de ese trabajo conjunto ha salido lo que está a la vista de todos, que creo que ha impactado.

LA UNIÓN DE DOS NEGOCIOS FAMILIARES

Han sido 35 años los que Rosa Mª Cumplido ha estado en su peluquería de la calle Ramón y Cajal, me he esforzado mucho por conseguir todo esto y ahora serán mis hijos los que continúen con la saga, toda la familia está junta.

La peluquería ha ganado en espacio y modernidad. En ella se ofrecen servicios de peluquería unisex, destacando entre ellos uno que no se ofrece en todo el entorno: integraciones y extensiones capilares.

Pero quien más ha salido beneficiada con el cambio ha sido su hija, que ha pasado de desarrollar su trabajo en un lugar reducido durante 16 años a contar con 3 salas: una dedicada a masajes y tratamientos corporales, otra más enfocada a los tratamientos faciales y una tercera para el servicio de depilación y fotodepilación. Además también ofrece servicio de maquillaje, manicura, presoterapia, radiofrecuencia y en un mes espera poder contar con un novedoso servicio de terapia sacrocraneal. Ahora siento que puedo desarrollar mi profesión como a mí me gusta y siempre he querido, dice Rosa.

Por su parte, el padre de familia, Juan, regenta junto con su hijo Juan Manuel el nuevo bar-restaurante que ya funciona en la Plaza de España, La Casa Grande. Food Gourmet. Tras darle muchas vueltas hemos aprovechado todos los huecos posibles para sacarle el máximo rendimiento adaptándonos a la propia casa dice Juan Manuel, quien destaca que su intención es ofrecer una comida exquisita a precios asequibles. Se puede tapear de una manera más informal en la zona de barra o disfrutar del salón restaurante de una manera más íntima. Cuenta con una carta muy variada, en la que destacan los arroces, una de las especialidades del cocinero. También llama la atención el sistema de cerveza, totalmente novedoso en Los Santos de Maimona: una cerveza artesana se encuentra en alto en grandes depósitos y viene directamente de bodega, no lleva CO2 y va empujada por conductos que la expulsan por un sistema de aire.

Ambos negocios están perfectamente integrados es esta mítica casa del centro de la localidad, aunque son independientes uno del otro. La familia Díaz Cumplido ha comenzado así a cumplir su sueño. Después de superar una fuerte crisis y muchos momentos de desasosiego se han reinventado y han comenzado, con mucho esfuerzo, una nueva andadura en la casa de sus sueños.