lorenzo montaño
Sábado, 25 de junio 2016, 09:42
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Pablo Infante siempre se muestra receptivo con nuestro periódico y no duda en sacar un ratito para contestar aquellas preguntas que le hacemos. En esta temporada no ha disfrutado mucho del fútbol pero se encuentra con ganas de seguir en la brecha, seguir peleando por estar ahí metido, aunque reconoce que después de lo que le ha tocado vivir no sabe cómo estará el mercado, ya que acaba contrato con la S.D. Ponferradina y la clave es encontrar un equipo que se adapte a sus exigencias deportivas y competitivas, mucho más allá de las económicas.
A la hora de hacer un resumen de su segunda temporada en la S.D. Ponferradina, el habilidoso extremo nos cuenta Después de consumarse el descenso obviamente nunca puede ser bueno, ni en lo personal ni en lo colectivo. Si a ello le sumamos que hemos tenido tres entrenadores (Díaz, Fabri y Rubén Vega) a lo largo de una temporada, se traduce en que la cosa no ha funcionado. Nadie imagina un desenlace así, más si cabe cuando en diciembre llegamos a situarnos cuartos y menos aun con la calidad que atesoraba la propia plantilla.
Las lesiones no le han dejado estar bien del todo durante la temporada a pesar de que los esfuerzos, por estar a disposición de los diferentes entrenadores que ha tenido el equipo, siempre fueron importantes, nadie pone en duda el trabajo del santeño-burgalés No he tenido suerte con las lesiones y lo mal empieza mal acaba. La semana antes de empezar sufro una rotura abdominal que me tiene 3 semanas de baja. El día del Real Oviedo, el sábado antes de partido sufro una sobrecarga que me imposibilita 15 días, el día del Bilbao Ahletic vuelvo al once y en el minuto 42 padezco una rotura muscular de 5cm en el gemelo, lesión que provoca una baja de un mes y para rematar el año, una patada en la rodilla me produce un edema óseo con un periodo de recuperación de 6 a 8 semanas. Así que espero que todos los males hayan venido este año y al próximo año pueda jugar de continuo y sin lesiones que es lo que todo jugador quiere.
Estas piedras en el camino no aminora el ritmo de Pablo que a los 36 años tiene claro que quiere seguir jugando y disfrutando del fútbol; el DNI no es un impedimento para dar todo una vez más sobre el verde. Esta temporada se resume en 20 partidos jugados, de los cuales 17 fueron en liga y 3 de ellos en copa La idea es jugar, con la edad que tengo y con lo poco que he jugado es difícil encontrar un equipo que comparta las mismas exigencias y aspiraciones que uno, pero siempre confié y confiaré en mi y en mis posibilidades, así que después de este año tan duro nos hemos hecho más fuerte si cabe, porque como dice aquel, se aprende más de las derrotas que de las victorias.
Termina la esta amena conversación con un saludo para todos los paisanos y una frase que nos indica las muchas ganas que tiene Pablo de seguir con su sueño deportivo Podemos saber poco del futuro, pero lo suficiente para darnos cuenta de que hay mucho por hacer. ( Alan Turing)
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